Un festejo más que merecido

Sentimiento Monumental- sentimientomonumental.blogspot.com / Blog dedicado al Club Atlético River Plate- Buenos Aires- República Argentina

UN FESTEJO HECHO POR Y PARA TODOS

Cuan merecido lo tuvo la gente, cuan merecida fue la histórica caravana que juntó una enorme multitud que se agolpó en la Capital Federal y con festejos a lo largo y a lo ancho de toda la República Argentina para volver a festejar el campeonato número 33 de la historia del fútbol profesional de River. Ese River que se vio afectado de muchas cosas, ese equipo que hoy disfruta la sensación única de ser campeón, de vivir un sueño hecho realidad como lo es hacer delirar a un país entero que está pendiente domingo a domingo de cada partido que el millonario se hace presente, que lo espera ansioso con tal de ver a sus ídolos, con tal de ver como es que le va al club de sus amores, el Club Atlético River Plate.

Un domingo atipico el que se vivió, debido a que River ya era campeón, la primera parte de la gente se juntó en la Peña y Arenales para ir a alentar al equipo en la última fecha del campeonato. Todos sabíamos que el resultado era anécdotico, que nada cambiaría y que solo restaba festejar, quizá aquellos que estuvieron en el estadio sintieron la fea sensación de comenzar perdiendo 2 a 0 con el equipo local con dos goles del máximo artillero del campeonato que es Darío Cvitanich, futuro jugador del Ajax de Holanda, cuyo segundo gol fue muy dudoso porque, muchos hinchas en la Avenida Figueroa Alcorta discutían si Carrizo le había cometido penal o no, lo concreto es que el penal fue concedido y a cobrar se ha dicho. A muchos hinchas les habrá pasado de no saber que hacer, si de ir al Obelisco directamente o emprender rumbo hacia el Monumental donde allí estarían los jugadores de River con el micro descapotable para festejar el nuevo título. El partido terminó, el millonario le dio vuelta el partido a Banfield, se lo ganó 3 a 2 con dos goles de Falcao y uno de Abelairas...¡frutilla del postre! los hinchas de River emprendieron rumbo hacia el obelisco para comenzar la caravana monumental. Una marea de autos, banderas, motos, gente caminando, un momento único e inolvidable para todos aquellos que aman la camiseta de River, saber que si iban a juntar una vez más, todos juntos a festejar, a ver miles de camisetas en la calle, a la espera del micro que traía a los jugadores para festejar. Desde muy temprano, ya desde las 12 del mediodía comenzó a llegar gente desde diferentes puntos del conurbano bonaerense tales como Olivos, Martinez, Paso Del Rey, Boulogne, Lanús, entre otros, todos unidos en un mismo sentimiento, el ver a River.

La espera no se sintió, el micro llegó a la Avenida Figueroa Alcorta minutos después de las 21. La gente llenó las avenidas Alcorta y Libertador, en lo que fue una verdadera fiesta, una fiesta que fue de todos, que unió, como siempre lo hace el fútbol y River especialmente a todas las edades, a todas las clases sociales, y a muchos puntos geográficos. Se pudo ver matrimonios con bebés, con esas personitas que ya desde muy chiquitos están sintiendo la camiseta de River y desde su año cero son campeones, nacieron ganadores. Matrimonios grandes aportando sus sonrisas, sus vivencias y experiencias, que no faltaron con las charlas épicas en las que se hicieron presentes los eternos, Amadeo Carrizo, ''Pinino'' Más, Norberto Alonso y Daniel Passarella, por supuesto muchos más, de esa lista de nunca acabar, chicos y chicas que aportaron todo el color agitando las banderas...todos ellos, contribuyeron a que, en un momento determinado de la tarde-noche, empezaran a sonar los primeros hits...como era de esperar, las dedicatorias al eterno rival, y, uno de los canticos más emocionantes que desde mi opinión hoy día salen de la tribuna, que con su ''hay que alentar de corazón...'' hace sentír más fuerte el latido del mismo y empezar a saltar. Bengalas, bombas de estruendo, papelitos y banderas flameando a cielo abierto...la fiesta fue de la gente, esa gente que ganó el campeonato desde las tribunas y bien merecido se lo tiene. Esa gente que se olvidó por un rato de tantas palidas, de la eliminación dolorosa de la copa libertadores, de la derrota en el clásico, de las declaraciones de Ahumada, ¡del incierto futuro de Ortega! que tan importante es hoy para el hincha de River que lo adora, fue una multitud que, luego de todos estos detonantes, al fin pudo ganar las calles por un sentido mucho más festivo que el protestar por las retenciones móviles o por tantas otras cosas. Esto fue un movimiento popular, un movimiento que unió a muchos, por un campeonato, por una pelota de fútbol, por River, por muchas cosas, y por sobre todas las cosas, porque hoy más que nunca...''la alegría nao tem fim''!

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