SOBRE LLOVIDO, MOJADO

Fútbol
Torneo Inicial
SOBRE LLOVIDO, MOJADO
River perdió ante Quilmes por la fecha 11 del Torneo Inicial, el gol de Martín Cauteruccio tras el error de Jonathan Bottinelli sentenció un resultado que si bien no era el más justo a la hora de pesar en la balanza, evidenció el poco peso de River en la cancha, que preocupa de cara al clásico del domingo.

El partido fue aburrido. Las situaciones de gol estaban aun más lejanas que los 105 metros de largo que posee la cancha de Quilmes y este parecía ser el preámbulo de un empate sellado: dos equipos que estuvieron hasta lejos de estudiarse, porque ni uno ni otro lograban tener más de diez segundos la pelota, el local apenas podía llegar al arco defendido por Marcelo Barovero con pelotazos desde el fondo, para que sus dos hombres en la ofensiva bajaran la pelota e intentaran quebrantar a los cuatro marcadores centrales ya habituales en el elenco de Núñez.

Por su parte River intentó tener sorpresa con Carlos Luna y Rodrigo Mora. El primero casi no gravitó en el partido y el uruguayo solamente pudo generar insinuaciones por su sector y claro, nunca tuvo la compañía necesaria de los encargados de llevar fútbol y velocidad desde la mitad de la cancha, hablamos de Manuel Lanzini y Carlos Sánchez. El primero no se siente cómodo dentro de la cancha, y el segundo intenta algo más pero está muy lejos de su mejor versión.

La única ocasión de riesgo a favor para el conjunto de Matías Almeyda estuvo en los pies del exvolante de Liverpool de Montevideo que recibió un buen pase luego de un desborde cuando el partido ya estaba 1-0 abajo, pero su remate se fue lejos del arco defendido por Marcelo Pontiroli. Su remate se fue lejos del arco, de la preocupación, del empate, y muy cerca del fastidio de todos los hinchas de River que no podían creer lo que veían. 

Si el partido terminaba empatado, ya sea en un gol, todas las miradas iban a estar puestas en el colegiado Silvio Trucco, que sobre el final dejó pasar un claro penal de Barovero sobre Cauteruccio y durante varios minutos mantuvo a la cancha de Quilmes paralizada, con las acciones que favorecían ampliamente al Millonario, que ni de esa forma pudo llegar a la paridad. 

River desconcierta, River es dudas, es un equipo que defiende y espera, que tiene mucha paciencia, pero su paciencia desespera y eso tampoco es positivo porque pasan cosas como las del domingo, un error y en consecuencia un gol en contra ante un rival directo, o un clavado empate, del que ya hay que olvidarse, porque los empates ya no suman. 

Se viene Boca el próximo domingo a las 15.30 en el Estadio Monumental: ¿se le prestará la pelota a un equipo como el de Julio Falcioni, que es bicho a la hora de tirar centros? ¿se lo va a atacar con un Manuel Lanzini lejano a su posición y con Davíd Trezeguet del que no se sabe su estado físico y un Carlos Luna que por la misma vía no termina de convencer? ¿solamente Rodrigo Mora será el abanderado una vez más de llevar las riendas del ataque, ante una de las peores defensas de Boca en los últimos años?. Pronóstico reservado para el clásico del próximo domingo en el Estadio Monumental, todo en River es una incógnita. Sobre llovido, mojado. Esperemos que no se repita. 

Blanco, Roberto Adan
Periodista- Blogger
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